23-02-2008 (Fuente: La Nueva España)
Las aguas vuelven a bajar revueltas por la ribera del Ganzábal. Ayer, último día de entrenamiento de la semana para la primera plantilla azulgrana antes de afrontar el choque del domingo con el Cudillero, resultó de gran revuelvo. La jornada fue de gran marejada en el seno de la entidad de Ganzábal. Los jugadores langreanos se encontraron con una desagradable sorpresa que provocó indignación y un mayúsculo enfado entre los integrantes de la plantilla. Tanto que el capitán Rufi se marchó del recinto deportivo langreano antes de concluir la sesión preparatoria.
Los hechos que ayer desencadenaron toda una tempestad en Ganzábal están relacionados con la grave crisis económica que atraviesa el Unión Popular de Langreo. Los futbolistas tenían previsto cobrar parte de las dos mensualidades que se les adeudan con el dinero que se recaudara de la visita del Real Oviedo a Ganzábal, que deberá producirse el próximo fin de semana. Los propios futbolistas iban a gestionar la venta de las entradas y ya habían quedado con algunas peñas oviedistas para hacérselas llegar en los próximos días, pero ayer, al ir al club a recogerlas, se encontraron con la sorpresa de que no va a ser posible pues la taquilla está embargada como consecuencia de los impagos a abogados que el club tiene pendientes por el «caso Villa».
Pero al margen de que los jugadores del UP Langreo no verán un euro del dinero que se recaude de la taquilla ante el Real Oviedo, lo que más dolió a los integrantes de la plantilla es que, como señaló el capitán Rufi, «llevamos dos semanas gestionando el tema y hasta la fecha la directiva nos había dicho que no había ningún problema, pero ahora es todo lo contrario, y donde primero dijeron que sí ahora resulta que dicen que no».
El entrenador, Paco Fernández, aseguró ayer que «lo que deseamos es que pronto llegue alguien y todo se solucione para bien, pero también pedimos que se nos hable claro y no que un día se diga una cosa y otro día una totalmente distinta, pues esto sólo conduce a que el ambiente se crispe más».
Los futbolistas jugarán mañana ante el Cudillero en una muestra más de profesionalidad, si bien mantendrán el minuto simbólico de protesta que ya llevaron a efecto frente al Hispano, pero la próxima semana puede pasar cualquier cosa. Por su parte, el actual dirigente en funciones, Adolfo Ceñera, no quiso comentar nada sobre el tema y se limitó a decir que se estaba buscando una solución.
Para echar más leña al fuego, el delantero Hugo García Requena, de 20 años y fichado este verano del Mosconia de Grado, no seguirá vistiendo la camiseta azulgrana por lo que resta de temporada. Aunque el futbolista negó que su salida del Langreo tuviera relación alguna con la crisis económica de la entidad, lo cierto es que Hugo está a disgusto y abandona Ganzábal. El jugador alegó para justificar los motivos de su marcha que «no estoy a gusto, pues en los últimos ocho partidos apenas he disfrutado de minutos y no volveré a los entrenamientos».
Hugo pretende que el club le conceda la baja para regresar al Mosconia, pero el Langreo no se la concederá al considerarlo «un jugador más de la plantilla», según señaló Paco Fernández.
https://www.lne.es/deportes/2008/02/23/marejada-langreo-21744216.html