05-06-2013 (Fuente: La Nueva España)
Pablo Lago afrontará su master personal en Ganzábal. Sacó con buena nota su inicio en su carrera en los banquillos con dos pases a la Copa Federación con el Luarca. Ahora intentará hacer un buen papel en un reto que no le asusta. Prefiere mantener el bloque y afirma que es todo un lujo la presión que va tener en un equipo que exige lo máximo. Por eso el objetivo es quedar en el puesto más alto y tirar de la cantera. Un aspecto que considera primordial para que el club azulgrana goce de buena salud.
-¿Qué supone para usted el reto de entrenar al Langreo?
Era lo que buscaba. Un sitio con buenos medios para trabajar y poder hacer muchas cosas. Este club me da todo lo que estoy buscando y estoy encantado.
-Las dos últimas temporadas logró dos clasificaciones para la Copa Federación con un equipo modesto como el Luarca. Ahora deberá afrontar un reto personal para crecer como técnico.
Vengo de un club modesto en cuanto a medios y limitaciones y ahora paso a todo lo contrario. Aquí se puede trabajar de otra manera y con unja exigencia mayor. Estoy muy motivado con este reto y sabiendo que la temporada y la exigencia va ser dura, pero eso le pasaría a cualquier entrenador que venga al Unión Popular.
-¿La ausencia por segundo año consecutivo de equipos como Caudal, Avilés o Marino hacen que el Langreo tenga que optar al primer puesto?
No me marco ninguna exigencia. Lo marcará lo que está acostumbrada la gente a una cosas por una tendencia y un historial de muchos años. Cuando se viene al Langreo hay que adaptarse a lo que exige este club: hacer una plantilla muy competitiva e intentar quedar en el puesto más alto.
-¿Pretende apostar por la continuidad o renovar el bloque?
Hay que analizar cuál es la situación y cómo se afrontará de cara al año que viene. Cada día puede dar muchas vueltas y hay que trabajar. Tengo claro que quiero apostar por una base que tuvo este año el equipo y quiere intentar mantenerla. Después me gustaría incorporar algún jugador para mejorar el rendimiento, al igual que sucede en cada equipo.
-¿Qué estilo le gustaría que adquiriese su Langreo?
El estilo lo marcan los jugadores. Se puede tener una idea muy clara y definida, pero si no se tienen ese tipo de jugadores no se conseguirá. Ahora estamos en esa fase de planificar cómo pueden ser los jugadores que se queden con idea clara, pero estamos abiertos también a otras ideas de sistemas y juego porque hasta que se cierre la plantilla será difícil determinar nada.
-¿Qué número de jugadores espera tener en su plantilla?
Irán en función de cómo se vayan desarrollando los días de verano durante la pretemporada, de lo que habla con los jugadores y de la economía de la que dispongamos. No quiero tener muchísimos jugadores en la plantilla porque tengo intención de tirar de gente joven, de gente que esté en el juvenil, bien para entrenar o para que nos aporten cosas en los partidos.
-El ascenso se le sigue resistiendo a un Langreo que afrontará su undécima temporada consecutiva en Tercera. La afición es una de las más fieles, pero también una de las más exigentes.
Es un lujo poder estar un equipo con una afición que siempre está ahí y con la idea de intentar recuperar a gente que no está acudiendo al campo. El planteamiento está claro: intentar ilusionar otra vez a la afición porque se sabe que responde y se ve en Ganzábal y fuera de casa.