16-05-2014 (Fuente: La Nueva España)
Por un motivo o por otro el Langreo siempre se cayó a las primeras de cambio en los últimos siete intentos por subir a Segunda B; un muro histórico que los azulgranas querrán superar este curso ante el Atlético Monzón. Para ascender a Segunda B será necesario que superen tres eliminatorias. Pero eso no preocupa ahora mismo a una plantilla que tiene claro que lo importante es pasar la primera ronda e ir "partido a partido". Y para apoyar esa idea están los ocho jugadores de la plantilla que ya han vivido en primera persona en otros equipos la experiencia de ascender a Segunda B: Guillermo, Pablo Acebal, Pablo Díaz, Alonso, Pepe Saavedra, Nacho Calvillo, Nacho Méndez, Alonso y Manu Blanco.
Tres de ellos lo lograron con el Caudal. El conjunto mierense consiguió subir dos veces en el último lustro. Nacho Méndez estuvo en ambos casos, en el de la temporada 2009-10 y en la 2011-12. "Lo importante es tener una buena seguridad desde la parcela defensiva e intentar no encajar. Y al menos marcar un gol a domicilio", reconoce. Y es que, a su juicio, el Langreo ha ido a más: "Llevamos un último mes muy bueno y confío en que podamos resolver bien la eliminatoria".
Méndez vivió el primer ascenso del cuadro blanquinegro junto a Pablo Díaz, y el segundo, con Pepe Saavedra, Nacho Calvillo y Pablo Acebal. El último de ellos consiguió subir dos veces de categoría. Lo hizo en Mieres hace dos temporadas, y con el Sporting B junto a Alonso en la temporada 2007-2008, en un año de gran recuerdo para ambos, ya que entonces también subió el primer equipo a Primera División.
Otros dos jugadores de la plantilla lograron ascender en plazas diferentes. Guillermo lo hizo con el Marino de Luanco en la temporada 2010-2011, y Manu Blanco, con el Caravaca en la 2007-2008. En el caso del portero, la clave es tener paciencia. "Debemos ser sólidos atrás, funcionar como un equipo, intentar marcar y no venirse abajo. En aquella ocasión empatamos 2-2 fuera de casa. Habíamos empezado perdiendo y aún así remontamos, pero nos empataron al final", señala el guardameta azulgrana.
Manu Blanco también ascendió a Segunda B. Aunque lo tuvo que hacer fuera de Asturias. En el año 2006 dejó el Avilés y se fue para el Denia. Allí consiguieron el primer ascenso del conjunto alicantino, aunque no lo pudo disfrutar, ya que la temporada siguiente se fue para el Caravaca murciano, que, aunque no ascendió, eliminó al Oviedo contra pronóstico en la primera eliminatoria.
En el Langreo, pese a que no ascendieron con ningún equipo, hay jugadores con experiencia en la división de bronce. Otero jugó en Segunda con el Logroñés CF, Zamora, Ourense o Cultural Leonesa. O Carly, que jugó con el Avilés en Segunda B, ya que el año del ascenso estaba cedido en el Navarro.
Lo que no es nuevo para una gran parte de la plantilla es afrontar una eliminatoria para ascender de categoría. Cristian y Chus lo hicieron con el Covadonga el curso pasado, y Luis, Borja Fernández o Nuño ya lo han intentando, sin éxito, con el propio Langreo.
https://www.lne.es/deportes/2014/05/16/especialistas-ascensos-20036331.html